Si no es un acabador de concreto o no está familiarizado con el concreto, la transpiración del concreto puede ser una exhibición desalentadora y desconocida. Si bien el concreto parece ser una base segura y resistente, la presencia de sudor de concreto puede alterar en gran medida su superficie, lo que puede resultar en muchos peligros y costos potenciales.
El sudor de hormigón, conocido como síndrome de losa sudorosa (SSS), es el resultado de la condensación que se forma a partir de temperaturas exteriores cálidas y temperaturas interiores más frías. Cuando el aire exterior cálido y húmedo entra en contacto con una superficie de hormigón fría, el aire se enfría rápidamente y forma gotas de agua exterior.
Cuando conocemos la ciencia de por qué se forma el sudor concreto, podemos implementar medidas que puedan ayudar a resolver este problema. El manejo efectivo del síndrome de losa sudorosa puede aliviar muchas preocupaciones y brindar condiciones más seguras.
Causas
La transpiración del concreto es más común en edificios que no tienen temperatura regulada y con muchas losas de concreto de superficie abierta. Suelen ser almacenes, garajes y edificios en construcción . Dado que la alta humedad combinada con aire caliente es un fuerte predictor de la transpiración del concreto , la ubicación juega un papel importante en la formación de condensación en el concreto.
Áreas como Louisiana y Florida son más propensas al desarrollo de sudoración de concreto. Su ubicación geográfica, donde se producen altas temperaturas y humedad, aumenta la posibilidad de que se forme condensación en las superficies interiores de hormigón.
Si bien sabemos que la razón principal de la transpiración del concreto tiene que ver con el aire y la temperatura del concreto, existe otra posibilidad poco común y tiene que ver con la humedad del subsuelo.
El hormigón puede parecer sólido e impermeable, pero en realidad es poroso en su estructura. La humedad debajo puede moverse hacia arriba a través del concreto a través de la presión hidrostática, lo que resulta en la formación de gotas de agua en la superficie. Aunque esta es una posibilidad, es una circunstancia poco común cuando esto ocurre.
Peligros
Existen muchos peligros cuando se trata del sudor de concreto, siendo el más común el peligro de resbalones. Las gotas de agua combinadas con un piso de concreto liso son una excelente receta para una pista de hielo improvisada. Dado que el agua es una sustancia clara, puede ser demasiado fácil para las personas caminar sobre concreto mojado sin siquiera saberlo hasta que golpean un lugar determinado con el pie y sienten como Humpty Dumpty cayendo al suelo. Los equipos operativos grandes, como una carretilla elevadora, también pueden perder el control sobre superficies mojadas y causar daños graves o incluso la muerte.
Las lesiones cerebrales y los huesos rotos son el resultado más común de un resbalón y una caída. Los empleadores no pueden permitirse el lujo de descuidar las medidas de seguridad vigentes para combatir la transpiración del concreto. Los grandes almacenes se utilizan a menudo para la fabricación y la producción. Las empresas deben ser conscientes del riesgo de transpiración del concreto para evitar poner en peligro a sus empleados y correr el riesgo de ser parte demandada en una demanda.
El moho es otro peligro potencial que puede resultar de superficies de concreto mojadas. El hormigón humedecido puede servir como el entorno perfecto para el crecimiento de moho, especialmente en interiores. Las alergias y enfermedades pulmonares pueden resultar de la inhalación de las toxinas dañinas del moho. Los objetos de madera y cartón que se asientan sobre el concreto húmedo también pueden albergar el crecimiento de moho y resultar dañados por el exceso de agua. Esto también puede resultar muy costoso para las empresas con grandes palets o cajas de producto sobre un suelo de hormigón transpirable.
Una reacción de sílice alcalina (ASR) es cuando el concreto se hincha durante un período de tiempo debido al pasado de cemento altamente alcalino y al amorfo reactivo que se encuentra en muchos agregados comunes, siempre con suficiente humedad. Cuando la humedad del subsuelo de pH alto se filtra a través del concreto desde abajo, puede causar daño permanente al concreto.
Prevención
Es importante tener en cuenta ciertos factores y tomar medidas de antemano para evitar la transpiración del concreto y ahorrar costos y tiempo.
Reducir la humedad
Reducir la humedad en el interior reducirá en gran medida la posibilidad de que la transpiración del hormigón se convierta en un problema. Sellar todas las entradas de aire exterior también ayudará a mantener baja la humedad y evitará que se forme condensación. Para reducir la posibilidad de que el concreto sude como resultado de la humedad del subsuelo, antes de instalar el concreto, puede colocar una barrera de plástico para que funcione como una barrera de vapor y humedad. Esto reducirá el riesgo de que el agua se filtre desde abajo y disminuirá la humedad del lugar.
Aumente la circulación de aire
La circulación de aire cerca del piso es imperativa para evitar que se forme condensación. Esta es una opción económica pero efectiva para quienes intentan mantener su interior seco y seguro. El movimiento del ventilador mantendrá el aire más seco y circulando.
Deshumidificador
Aunque los deshumidificadores son costosos, pueden ser muy efectivos para prevenir la humedad en interiores. Trabajan para reducir la humedad filtrando el aire y sacando el agua del aire. Los deshumidificadores de grado comercial son una opción inteligente para edificios grandes.
Subir la calefacción
Reducir el uso de aire acondicionado y mantener la temperatura más cálida ayudará a que el aire tenga la misma temperatura que el concreto. Esto ayudará a que no se forme condensación porque el alto contraste en el aire y la temperatura de la superficie ya no estará presente.